El encuentro comenzaba en Mengíbar con un equipo visitante claro dominador del balón, tanto que en el minuto dos Francini adelantaba a los suyos en el marcador y tan solo un minuto después Saladié hacía lo propio para aumentar la ventaja.
El partido seguía con los visitantes con un dominio claro del juego y Mengíbar trataba de tener más posesión de balón, pero en el minuto 7 el gol de Rahali hacía que Mikel Diestro pidiera tiempo muerto y se decidiera por el portero jugador para intentar frenar la avalancha de Peñíscola. El juego de cinco no le daba resultados a Mengíbar, un juego muy estático por parte de los de Diestro y una gran defensa de Peñíscola que deshacía cualquier intención de Mengíbar.
Tanto así que en un robo de balón con el portero jugador, era Saladié el que volvía a encontrar la portería rojilla en el minuto 13. Tan solo unos segundos después era Tortu el que pondría el primer gol en el casillero de los locales.
Seguía Mengíbar con el portero jugador pero no conseguía nada y Peñíscola continuaba con un ataque muy intenso que ocasionaba que Mengíbar se pusiera con la quinta falta a menos de dos minutos para el final de la primera parte y unos segundos después otro error con el portero jugador ponía el quinto en el marcador visitante y así nos iríamos al descanso.
Al comienzo de la segunda parte, Mengíbar salía con otra cara, con un juego mucho más intenso y en el minuto 23 Tortu encajaba el segundo para los locales y el equipo se crecía un poco más. El partido siguió sin muchas ocasiones para ambos equipos y en el minuto 30 una mano de Francini muy cerca del área que lanzaba Manu Leal, le daba el tercer gol a Mengíbar y la grada aún soñaba con la remontada.
Pero a pesar de que la defensa de Mengíbar estaba mucho más solida y el ataque también conseguía acercarse más a la portería visitante, no hubo más ocasiones claras y el partido terminó con la derrota por 3 goles a 5 ante un Peñíscola que sin duda aprovechó las dudas del conjunto rojillo en la primera parte.